(
Arcos de la Llana
)
Data de mediados del siglo XVIII. Fue construida por el cura de la localidad Francisco Romo. Este cura encomendó a la cofradía de Santa Bárbara la conservación y restauración de la ermita a partir de que él falleciese. La fiesta se celebra el 4 de diciembre. La historia de Santa Bárbara relata que el padre de Bárbara, Dióscuro, de religión pagana, ordenó construir una torre para encerrar en ella a su hija, a fin de protegerla de las miradas de los hombres. Después, cuando la invitó a tomar en consideración las propuestas de matrimonio, ella, determinada a consagrarse a Dios, expresó su contrariedad. Durante una ausencia de su padre, se autobautizó. Al volver el padre, éste se enteró por ella misma de su adhesión a la fe cristiana, con lo que decidió matarla, pero ella logró ponerse a salvo milagrosamente. Reencotrada por su padre, la entregó al gobernador para que la sometiera a crueles tormentos y después la matara. Fue flagelada, envuelta en ropas tan vastas que la hicieron sangrar en todo el cuerpo y encerrada en la cárcel, durante la noche recuperó la salud milagrosamente. A la mañana siguiente la sometieron a otros duros tormentos, como cortarla los senos. Por fin fue condenada a la degollación, ejecutada por su mismo padre, el cual inmediatamente después de la muerte de su hija fue herido por un rayo que lo aniquiló sin dejar rastro. Fue incluida dentro de los 14 santos auxiliadores y es invocada contra la muerte inesperada. Por eso fue elegida patrona de los artilleros, mineros, bomberos y de cuantos corren peligro de morir por un rayo a por el fuego.